martes, 6 de mayo de 2008

Nightwish en el Salón 21


(Primera foto por: Pablo Santillana, el resto de las fotos por: Germán García)

Nightwish es una de esas bandas que fácilmente podrían tocar en recintos con capacidad para 5 mil espectadores o más, y sin embargo prefieren tocar en lugares pequeños donde puedan sentir el calor de su público. Y a su público le gusta sentir empujones, torteadas y sudor de otras personas en su cara todo por ver a su banda en vivo. Aunado a esto, en México nunca faltan los espectadores que quedaron atrapados en tercero de secundaria y que creen que hacerse los graciosos los hace mejores personas. Esto sólo haciendo que la espera de dos horas adentro del salón 21 fuera casi insoportable.


Afortunadamente unos minutos pasados las ocho y media de la noche la tortuosa espera terminó, y Jukka, Emppu, Toumas y Marco saltaron al escenario, seguidos de la divina Anette Olzon.



Abrieron con Bye Bye Beautiful y el recinto entonó el coro religiosamente, sí, hasta los Tarjistas fundamentalistas cantaban como quinceañeras en un concierto de Mecano el coro que fue escrito para despedir a la que fuera vocalista de la banda. El sonido fue malo como sólo el sonido del Salón 21 puede ser; por momentos se escuchaban más los gritos y cantos de las personas que Anette misma.


Después de la primera canción Anette se dirigió a nosotros y pidió la disculpáramos por el hecho de que no habla español, yo la disculpé también por el hecho de que masticara el inglés. Introdujo la siguiente canción y siguieron con Dark Chest of Wonders canción que para ser sinceros no es de mis favoritas pero en vivo se sintió espectacular, y me gustó cómo la interpretó Anette. La tercera canción que tocaron la noche del sábado sí es una de mis favoritas: Whoever Brings the Night, misma que disfruté mucho y que incluso olvidé lo patético que llegaba a ser el sonido en ocasiones. Anette era impresionante, sabe mantener al público atento y tiene un carisma y una presencia escénica que dejaron ver su valía dentro de la banda.



Así la banda siguió con una de las canciones favoritas entre el público, hablo de The Siren, canción que sobrepasó mis expectativas sobre Anette cantando las canciones que eran de Tarja originalmente. Realmente supo ejecutarla bien y a su manera sin tratar de imitar a nadie. Posteriormente vino la canción a la que hay que culpar por ver niñas de 12 años haciendo fila para el concierto: Amaranth. Aunque eso no impidió que el recinto entero entonara el coro, tanto que incluso los cantos del público sobrepasaban en decibeles al sonido del lugar.


La banda se retiró, y la iluminación cambió a un tono azuloso y bastante tenue. Poco después regresaría el buen Marco con una guitarra acústica en mano, ya sabía de qué se trataba, iban a tocar The Islander. Ésa era una de las razones por las que había soportado dos horas adentro del Salón 21, y no me defraudó, fue para mí la mejor canción de la noche. Misteriosamente, esta canción no fue tan coreada como la anterior. Lamentablemente Anette cometió algo que hizo un tanto agridulce aquél apoteósico momento: se puso un sombrero de Charro…



En fin, sobrevino una canción que musicalmente es inconmensurable, The Poet and the Pendulum. La voz de Marco fue impecable, y en general la canción fue ejecutada bastante bien en vivo. Vaya, fueron trece minutos de cielo, aunque no pierdo la esperanza de verla en vivo con una orquesta, y con un mejor sonido.


Las siguientes dos canciones, Sacrament of Wilderness y Sahara no fueron lo mejor de la noche pero sí valieron la pena, sobre todo la segunda que me recordó bastante lo impresionante que puede llegar a ser Toumas a la hora de componer. Luego tocarían una pieza instrumental, Last of the Wilds, misma que yo disfruté muchísimo ya que fue de las pocas canciones donde se pudo apreciar mejor la música de la banda.


Y finalmente “cerrarían” con Nemo, canción que esperaba mucho, y que me frustró bastante no poder escuchar bien el solo de Emppu gracias al pésimo sonido del lugar.


La banda se retiró, la gente los aclamó, y regresaron a tocar 7 Days to the Wolves canción que al parecer yo soy el único que no disfrutó tanto porque el resto de los presentes parecían bastante entusiasmados. El segundo encore fue Wishmaster, de las favoritas de los fans, y misma que fue increíble así como poderosa. Finalmente cerraron con Wish I Had an Angel, y el lugar estalló. Y no era para menos, no sólo es de las mejores canciones en el repertorio de la banda, sino que también es de las consentidas.



La banda se despidió, Jukka aventó las batacas, Marco y Emppu aventaron las uñas que les quedaban; todo mientras Anette se dejaba querer por el público.


Así terminaba un buen concierto, opadaco por el público y por el pésimo sonido del lugar, pero que fue rescatado por la banda. Mención aparte merece Jukka, ese señor es impresionante en vivo, no le hacen favor las versiones de estudio, pero en vivo es un monstruo. No sé, espero que la próxima vez que los vea sea en un lugar mejor y con otro tipo de público…

6 comentarios:

  1. Supongo que a veces sucede que ni la mejor banda puede hacer algo por las pésimas condiciones del lugar en que tienen que tocar. El sonido fue un asco de principio a fim. El lugar es un huevo (bien pudieron hacer el concierto en un lugar pequeño pero no tan minúsculo y con mejor acústica).

    Ni mencionar a los nacos que anduvieron empujando durante dos horas, patéticos. Esa gente como que no entiende que se puede echar desmadre sin tener que andar golpeando y agrediendo a la gente. Y es que la verdad sí se me hizo mamada eso de que los cuatro gordos gigantes que casi me asfixian también anduvieran aplastando a una chava más chaparra que yo. Luego también vi gente que tenía la nariz rota.

    Sobre el concierto en sí comparto tu opinión salvo por Sacrament of wilderness. A mí me encantó, sobre todo porque parece que la canción estaba hecha para Anette y no para Tarja. Por otro lado, me llamó la atención que casi nadie coreara "The Islander", pero que "Sahara" sí tuviera tanta aceptación.

    Lo mejor de la noche: Jukka. Ahora que lo vi en vivo puedo decir que es de esos bateristas infravalorados. Mis respetos para ese hombre.

    Eso sí, tampoco dejo de mencionar a Anette, que sí sabe cómo interactuar con el público, porque si no hubiera sido por ella, seguramente a la banda (salvo por Marco, ya que Tuomas es un tímido mudo, y los demás jamás abren la boca) le hubiera sobrado frialdad.

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  2. Bueno, imagino que el sonido fue demasiado perverso, para que no solo ustedes sino todos en general lo criticaran.

    Envidia... la verdad, si.
    Me encanta Nightwish, (Hasta con Anette incluida) Obvio, soy Tarjista y lo saben, pero considero que Anette esta ahí por algo y leyendo que mantuvo el carisma en el público me emociona y alegra, bien por ella

    Jukka, es un señor baterista siempre lo he dicho y leer que en vivo es el mejor, me emociona aún más.

    Emppu y su solo de Nemo, lástima que el mal sonido no los haya dejado escuchar esa belleza de tonalidad.

    Marco es genial por si solo no necesita presentación... y el alma de esta banda es Toumas, me encantó su pinta y sobretodo cuando me dijeron que se abrió la camisa, ahí sí que me da envidia en potencia, y no duden.

    Igual, groso que hayan estado ahí, que se hayan divertido y pues me quedé esperando una llamada...

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  3. Pues esta fue la 1ra y ULTIMA vez que voy al vive cuerve, que lugar tan incomodo, la pesima acustica, los excesivos precios y sobre todo los gorilas de seguridad ¬¬
    Estoy deacuerdo, pinches ancos, en el salon habian niños y estos imbeciles querian hacerse graciosos empujando gente ¬¬
    En cuanto al concierto, ME ENCANTO!!!
    Me fascina este nuevo Nightwish!!! El viejo no me gustaba mucho :s
    Espero vuelvan pronto ^^
    Yo tambien escribi una rseña de los dos conciertos en mi blog por si alguien quiere comentar :p
    saludos

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  4. Honestamente... Los técnicos de sonido merecian ser despedidos. Algunos "fans" con cromosomas faltantes si merecian ser sacados de el salón, y tambien de su miseria. Y las niñas (y niños tambien) que apenas cantan "Amaranth" y la cancion que Tuomas le hico con amor a Tarja nada mas estorbaban y me preocupaba pisarlos al momento de saltar.
    Si hubiera sido el concierto de cualquier otra banda que no supieran como dar un espectaculo si hubiera sido todo un fracaso.
    Pero!
    Para mi gusto sobrellevaron muy bien los problemas del lugar y supieron dar uno de los mejores conciertos que he atendido. La energia que Anette irradiaba fue sorprendente y te prendia mas cuando ya sentias que no podias saltar mas, como en "Nemo". Marko sobrepasó mis epectativas tambien, con la energia que le pone a su bajo. TUomas me impresiono con la forma de hacer su headbang y seguir tocando a la vez, pero si se veia muy mudo. Empu, pues que decir de el. Todo un maestro con la guitarra, y el espectaculo que daba aun sin tener microfono para el fue muy bueno. Jukka... el se merece todo un estudio y una tesis. Es impresionant como puede tocar tan rapido, mas rapido de lo que un humano deberia. Me sorprende que su club de fans no sea tan grande y su Wiki sea el mas corto del grupo.
    En cuanto al sonido, pues yo no me quejo por que en donde yo estaba si podia apreciar la voz de Anette (exepto cuando la gente coreaba). Y si pude oir los solos de Empu en "Last of the Wilds" y "Nemo". De lo que me quejo es que los demas no pudieron apreciarlos como yo.
    En fin, se le da un 5 al Salón por la mala organización y el mal sonido.
    Pero a Nightwish no se le puede da rmenos de un 100.

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  5. como se nota que son una bola de nacos que todavia no saben disfrutar de un concierto, el salon 21 tiene una acustica buenisima, pero porsupuesto si estan entre el mar de gente se va a escuchar mal, un concierto se disfruta desde un lugar donde puedas identificar muy bien el esenario por ejemplo en el segundo nivel ahi la musica se escucho increible, solo les doy un consejo la proxima vez que decidan ir a un concierto es para ir a disfrutar de la musica no es para irse a dar de empujones con gente que ni conoces y aparte no se llaman uñas se llaman plumillas naco!!!!

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  6. Duh... La queja es precisamente por los indios que andaban empujando a la gente (los dos autores del blog, güey) que no andaba de humor para estar soportando a esa clase de personas que sólo iban por el desmadre y la violencia.

    A la próxima a ver si le pones signos de puntuación a tu comentario, naquito.

    Y por cierto, el sonido no es bueno por ningún lado.

    (¿Por qué no te quejaste de lo de batacas, si es baquetas? Tanto escándalo por una mamada...)

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